El sol, el paso del tiempo y muchos otros factores dañan los faros de nuestros coches y se vuelven opacos o amarillean. Esto no solo es un problema estético sino que es una cuestión de seguridad, los faros alumbren menos dificultando la visibilidad. Para acabar con este problema, hay que pulir los faros, una sencilla tarea que podemos hacer por nosotros mismos.
Material Necesario
1– En primer lugar, limpiaremos el faro con un trapo mojado en agua y jabón para retirar todas las manchas de suciedad, mosquitos o cualquier otro resto que pueda interferir en el proceso de renovación del faro.
- AUTOSOL champu para automoviles
- Cinta de carrocero
- Trapos de algodón 100%
- AUTOSOL Renovador de faros
- Lija de agua (opcional)
2– Una vez limpio, aplicaremos sobre el faro AUTOSOL renovador de faros. Se recomienda seguir las recomendaciones de seguridad indicadas en el envase.
3– Ayúdate del trapo de algodón para extender el producto por todo el faro e inicia el proceso de pulido mediante movimientos circulares.
4– Es conveniente aplicar algo de presión para acelerar el proceso, el aspecto del faro irá cambiando y cada vez será más trasparente. Se recomienda aplicar el producto varias veces dependiendo de lo deteriorado que se encuentre el mismo.
Opcionalmente, también pueden usarse lijas de agua de 2000 o 2500 para lijar los faros completamente, antes de aplicar AUTOSOL renovador de faros.
5- Finalmente utilizaremos un paño limpio y seco para sacarle brillo, de nuevo aplicaremos movimientos circulares, para eliminar cualquier resto de producto.
Cabe destacar que esta operación requiere de bastante paciencia, ya que al menos se necesitarán unos 25/30 minutos para pulir un faro y más tiempo en el caso de que esté muy deteriorado.
Con 75ml de producto podremos pulir los dos faros y nos sobrará producto para el mantenimiento de los mismos que es recomendable cada 6 u 8 meses.